La renovación completa de tu hogar es un emocionante paso destinado a mejorar tu calidad de vida y salvaguardar tu patrimonio. Sin embargo, en medio de la planificación y ejecución de la remodelación, es fácil pasar por alto un aspecto esencial: la actualización del seguro de salud de tu vivienda.

La reforma integral no solo implica cambios estructurales, sino que también debería motivarte a revisar y ajustar tu póliza de seguro para garantizar una cobertura adecuada sin comprometer tus finanzas.

En este artículo, exploraremos la contratación de un seguro de salud asequible después de una renovación completa, proporcionándote consejos prácticos para proteger tu inversión y asegurar la tranquilidad en tu hogar renovado.

Factores que influyen en la asequibilidad del seguro de salud

Algunos de los aspectos más influyentes que pueden hacer que un seguro de salud sea más económico que el resto son los siguientes:

1. Edad y salud: Las personas jóvenes y saludables suelen obtener precios más bajos, ya que las aseguradoras presuponen un menor uso del seguro.
2. Copagos: Las pólizas con copagos altos tienden a ser más económicas, puesto que implican costes fijos por servicios médicos específicos.
3. Coberturas limitadas:Las pólizas con coberturas más limitadas son generalmente más asequibles, aunque ofrecen menos protección en caso de enfermedad o lesión.
4. Ubicación: Las comunidades con precios de atención médica más bajos tienden a tener seguros de salud más económicos.
5. Beneficios opcionales: Excluir coberturas opcionales como el seguro dental, la visión o los medicamentos recetados puede reducir el coste del seguro médico.

Es crucial destacar que la elección del seguro debe basarse en las necesidades de salud y la situación financiera de los residentes de la vivienda renovada.  A menudo, pagar primas más bajas implica una cobertura limitada, por lo que es esencial optar por una póliza que cubra exactamente lo necesario.

Aspectos a considerar antes de contratar un seguro médico económico

Como ya hemos visto, antes de contratar debes de asegurarte de que estás obteniendo una cobertura adecuada a tus necesidades. Te recomendamos que revises los siguientes aspectos:

• Coberturas: Verificar que la póliza cubra necesidades médicas como consultas, hospitalización, cirugía, medicamentos y atención preventiva.
• Cuadro médico: Confirmar la inclusión de tus médicos o especialistas preferidos.
• Precios: Comprender los costes asociados, desde primas mensuales hasta copagos, y asegurarse de que sean asequibles.
• Cobertura de medicamentos: Revisar la inclusión de medicamentos habituales y los copagos asociados.
• Límites y exclusiones: Examinar los límites máximos de cobertura y exclusiones para evitar sorpresas desagradables.
• Periodos de carencia: Comprobar que los periodos de carencia no afecten tu capacidad de hacer uso de las coberturas necesarias.
• Servicios preventivos: Asegurarse de que la póliza incluya chequeos anuales, vacunas y pruebas de detección.

Por último, investigar la reputación de la aseguradora y leer reseñas de otros asegurados para evaluar su satisfacción con el plan puede ser de gran ayuda a la hora de tomar una decisión final. No olvides comparar diversas opciones y no te limites a revisar un solo plan.

Todo esto te ayudará a encontrar la póliza adaptada a tus necesidades y presupuesto tras la reforma.